La caca es fascinante. Es fascinante porque sale de nosotros.
Porque da risa.
Porque a veces es grande, a veces es pequeña e incluso a veces tiene formas raras, enigmáticas, faraónicas.
La caca da asquito a muchos, pero gusta a la mayoría.
De lo contrario, no hablaríamos tanto de ella. No nos haría tanta gracia ni nos invitaría a mirarla curiosos, así como un pececito torpe, flotando en nuestro inodoro.
De caca sabe mucho Taro Gomi, un dibujante japonés que lleva años, y años, y años, vendiendo libros alrededor del mundo con Todos hacemos caca (Blackie Books).
Su trabajo ya es un bestseller.
Sus cacas de formas y colores variados han llegado a millones de hogares de todo el mundo , a las bibliotecas infantiles pero también a las de los adultos que, fascinados por la temática, no pueden evitar reír también.
La caca es fascinante, también por esa sonoridad.
Cá-cá.
Cá-cá.
Ca-qui-ta.
Qué fácil es pronunciarla.
Casi tanto como hacerla.
Casi tanto como aplaudirla.
Casi tanto como disfrutarla en este libro infantil, que no huele mal, sino que es maravilloso.
Fuente: www.playgroundmag.net