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La reseña de Groza y compañía…

La noche del domingo 23 de noviembre del año del señor – oscuro – 2025, será recordada como la perdida de apreciación y valoración por muchos para una gran banda que puede ser colocada en nichos más voluminosos, y no sólo para las 25 personas que pagaron boleto para ver un acto chingón, fiel representante de la corriente en la que se sumergen, avanzan y nadan en total control de sus facultades técnicas interpretativas…

Groza llegó con altas expectativas a un sitio que ya puede considerarse como obligada cita metalera, el Inked Stage Bar. Lástima, no acudieron los que andaban hasta apartando boleto. Ni pedo, no es de a huevo ir, o que te guste la banda en cuestión. Pero todo el año hay miles de pendejetes que se quejan de que no hay muchos eventos, o que se traen a los mismos de siempre. Repito, no es de a fuerzas que vayas, pero es de mierdosos, el decir que no hay escena, que no mamen…

Más porque los acompañaron dos chingones teloneros como Rage Ov Sanity y Them; ambos originarios de esta especie de república. Ambos muy cabrones y más que cumplidores. Sugerencias para aquellos que dicen ser más nacionalistas que el señor del bigotito…

Anyway, fue una noche que cumplió con creces a todos esos que le cayeron, porque hubo música de calidad, entrega y descubrimiento. Los tres actos que conformaron esta obra de este post black metal fueron por todas las canicas… Cosa que lograron con huevos y destreza…

Los tres grupos sacaron sus mejores pasitos rambolescos y prendieron a los testigos de sus acciones. Los dos primeros, mexicanos, no se dejaron espantar por tener a unos germanos como headliner, más al contrario – como decía Lord Peña – les animó a destacar lo mejor de sus inspiraciones… Dos perfectos combos que allanaron el camino a la estrella drepesiva que vendía a continuación…

Groza repite fórmulas, pero lo hace de manera tan efectiva que parece que ellos no sólo se apropian de la melancolía, sino que pareciera que la inventaron. Duro y directo al alma, con orientaciones para ponerse uno como bolas de perros.. hasta Detroit…

Y no sólo es la música, también tenemos a la valentía, coraje y confianza que el doñito de Beyond Prods le tiene a una ciudad que es más mocha que el manco. Lo mismo puede expresarse del venue, porque, hasta eso, los metaleros de estas demarcaciones no son tan pedotes como sus rivales los fresas… O eso es lo que notamos, y sí, nosotros si consumimos, tampoco es para que nos den un premio, pero hicimos el gasto en todos los sentidos…

Fue una noche chida, sin contratiempos, con cierta camaradería en

Creado por Invidente Zurdo