Invidente Zurdo
Colaboración de Cerveceando & Mezcaleando
Las chelas también pueden ser de uva, o de vino para ser un poco más específicos. Es una tendencia que pronto estará en todos los países que producen vinito del bueno; y eso que hay países con larga tradición en eso pero que apenas están incursionando en la fabricación de suculentas birras. Pero por lo que se dice y se sabe, estas amargas están very deli. Y tengo que creerles porque la mera verdura, su servilleta, el Fugas AA, todavía no le ha entrado a estas maravillas.
Incluso, desde el otro lado del gran charco, España, todavía no tiene esa sana costumbre de hacer cervezas de vendimias masivamente. Pero ya están dando los primeros pasos y por lo que nos hemos enterado, les están quedando de rechupete.
Y vámonos – juimonos – yendo desde el inicio como debe de ser. Así que lo primero que debemos saber que las chelas de vendimia son Grape Ale que aprovechan al máximo el mosto de la uva, ya sean varietales blancas o tintas, a lo cual se les unen los cereales y lúpulos. Con el amplio espectro de uvas que hay en el planeta, imaginen la de variedades de cervezas que pueden sacarse al mercado.
Teniendo características especiales, perfectamente encajan en el grupo de cervezas artesanales, ya que cuenta con una gran riqueza y calidad en sus maltas, lúpulos y sus técnicas de elaboración. Esto da como resultado una bebida bastante singular y chingona, única podríamos decir. A esto hay que agregar algunas cervezas de vendimia tienen la particularidad de contar con añadas – es decir, períodos largos de almacenamiento –; y en general, son hechas sin aditivos o colorantes. Destacando que tienen una doble fermentación cuando son embotelladas, dándoles mayor profundidad y carácter.
Pero hay que aclarar que no es lo mismo fabricar una cerveza artesanal que una de vendimia, son procesos diferentes. Todo va de acuerdo al estilo que el maestro cervecero quiera lograr, y esto inicia con la varietal, es decir la uva, que debe de ser de locales y de gran calidad. Después de ello, se revuelve el mosto de uva con el mosto cervecero, o en su defecto, las uvas se agregan durante la fermentación o después de ésta.
Es en la fermentación donde reside el mayor reto para cualquier maestro ya que las levaduras deben actuar tanto sobre los azúcares de las uvas como sobre los de los granos de malta, esto debe ser hecho con un manejo técnico especializado. De aquí surgen complejas interacciones entre los azúcares y ácidos de las uvas y los cereales, resultando una bebida que combina características del vino y de la cerveza. Igual, puede añadirse un período de envejecimiento en barricas de roble, lo que aporta notas adicionales de tostados y especiados, enriqueciendo aún más la complejidad de la bebida.
¡Voila! Tenemos una cerveza ganadora, fregona y llena de sabores, ahora sólo resta encontrar una por nuestros rumbos y echarnos una de esas catitas que tanto nos gustan.
Fugas AA reportando para Ocioltura / Cerveceando & Mezcaleando
