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Anatómica de Cisco Jiménez se instala el Museo Amparo

150 obras en un espacio de salas temporal pueden sonar, o verse, abrumador. Pero no es así. Una labor que lleva décadas, por parte de Cisco Jiménez, ha encajado de manera idónea a las dimensiones de las habitaciones del Museo Amparo. Parece que así hubiera estado planeado, a lo mejor sí, a lo mejor es una mera cuestión de apreciación… o un reflejo de imaginación.

Caos Social de Cisco Jiménez, imagen del Museo Amparo…

Esa última palabra define bien el talento del nacido en Cuernavaca, Morelos. Trabajos que acaparan colores y conceptos, entrelazados sin problema alguno, al menos nos deja la apreciación visual. Pero dejemos que hablen las definiciones del propio museo, él cual ha confiado en el buen quehacer de un contemporáneo del arte mexicano.

La exposición ofrece una revisión de los símbolos y temas que han atravesado la obra del artista durante las últimas tres décadas. Las 150 obras, se ve compuesta por pinturas, collages, esculturas, cerámicas, ensamblajes e instalaciones.

En una galaxia muy lejana de Cisco Jiménez, imagen del Museo Amparo…

La muestra destaca el uso de la figuración de Jiménez, su enfoque crítico de la cultura contemporánea, así como sus precedentes históricos, los cuales vinculan su práctica con las tradiciones del estudio y el dibujo anatómico, combinando técnicas tradicionales con formas y realidades contemporáneas.

Atractivos, humorísticos e incómodos, los trabajos de Cisco Jiménez son complejos seres estéticos, que para fines representativos se adaptan bien a los aires que corren en una sociedad como la nuestra, sin importar la índole que cada uno quiera darle.

Evidencias de Cisco Jiménez, imagen del Museo Amparo…

Para esta exposición, el curador Tobias Ostrander tomó en cuenta la arquitectura específica de las salas temporales del Museo Amparo para presentar una manera única de acercarse a la producción reciente del artista. Interviniendo este párrafo, podemos agregar que supo considerar las características físicas y perceptivas de este lugar. Un sitio que, por su sola historia arquitectónica, ya es un ente para visitar. Ahora imagínenlo con las piezas de Cisco.

Montado a la manera del salón francés e intencionalmente siguiendo una estructura no cronológica, cada espacio se centra en una serie de símbolos e investigaciones emprendidas por el artista. Estas cuatro delimitaciones temáticas son, a lo mucho, tentativas, pues los múltiples y diversos intereses son repetidamente combinados dentro de un solo trabajo de Jiménez; sin embargo, ofrecen un intento de desmembramiento discursivo a su intrincada producción. Por eso es necesario hablar de esas temáticas.

Niños Sicarios de Cisco Jiménez, imagen del Museo Amparo…

La figura cortada: Presenta obras que refieren al interés del artista sobre el género, la prótesis y el interior del cuerpo, cada uno hecho de manera extraña, perturbadora o grotesca a través de su manipulación específica de objetos e imágenes encontrados. El cuerpo como un misterioso sitio de reproducción, dolor y transformación, es abordado en muchos de los trabajos presentados.

Paisajes rotos: Aborda las tradiciones de la pintura paisajista local de Morelos, entremezcladas con referencias sobre el cuerpo humano, geología, plantas, insectos y arqueologías futuristas. Las formaciones rocosas se han convertido en un interés para el artista, a menudo mostradas en sección transversal, dentro de pinturas que dialogan de cerca con diagramas científicos.

Tikal con tornamesa de Cisco Jiménez, imagen del Museo Amparo…

El núcleo mítico: Como tema central de la exposición, contiene obras que abordan el interés del artista por la combinación de símbolos derivados de las cosmologías prehispánicas con mitos más recientes generados por el cine popular de ciencia ficción y la cultura comercial. Jiménez identifica obsesiones actuales referenciando tanto el pasado cercano como el lejano, una manera de afrontar un incierto y potencialmente catastrófico futuro.

Signos urbanos: Esta sala contiene piezas que celebran la estética generada en una ciudad periférica como lo es Cuernavaca, en donde los tradicionales rótulos de la calle conviven con la pulida publicidad computarizada. Muchas obras surgen a partir de herramientas de trabajo, como una referencia a la creatividad derivada de la precariedad. Incluye esculturas hechas de elementos vernáculos y materiales asociados a Cuernavaca y a su contexto sociocultural contemporáneo.

Cuatro formas de entender o intentar comprender las intenciones del oriundo de la capital morelense. Cuatro formas que nos pueden mostrar lo chocante del interior humano, con sus respectivas intenciones.

Inviertan un poco de su valioso tiempo yendo a las coloniales, pero bien mantenidas instalaciones del Museo Amparo, créanme que valdrá la pena la inversión de tiempo que le otorguen a cultivar un poco de arte con esta exposición…

Pd. Les dejamos, para abrir apetito visual, estas imágenes de algunas de las obras de Cisco que se hallan dentro del Museo Amparo…

Escrito por Invidente Zurdo

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