Invidente Zurdo
Hablar de Udo Dirkschneider es referirse a una leyenda viviente del heavy metal, es mencionar, aunque a muchos les cause gracia y burla – ojo pinche gringos caga leches – de una de las más grandes influencias musicales para muchas bandas contemporáneas del género; obviamente, es en Alemania donde más se percibe este concepto.
Don Udo no tiene que demostrarle nada a nadie, incluyendo a sus antiguos cómplices de Accept, es más, no les debe nada, ya que todos esos originales componentes saltaron juntos al vacío para darle una gran patada a la pared de una Alemania sumida en una crisis de identidad, que benefició y enriqueció todo el panorama musical de esa nación. No sólo en el rock – y todas sus nacientes vertientes -, también emergieron artistas que crearon, a su muy particular manera, corrientes que todavía siguen vigentes. ¿Nombres? Die Krupss, Kraftwerk, In Extremo, Rammstein, Faun, Paul Van Dyk, y un largo etcétera que han tenido sus éxitos, a veces sólo como one hit wonder y en otras con varios sencillos que los han consolidado en la escena internacional.
Udo está en ese círculo de nombres a mencionar por los melómanos germanos y circunvecinos. Mencionar su larga discografía nos daría la razón, porque las distintas disqueras, desde labels mayores o más locales, han confiado en él, en su música y su arte.
Por eso AFM records le confió uno de sus mejores trabajos: Navy Metal Nigth. Este disco, en todo su concepto, es un material bien trabajado, cuidado y producido en todos los aspectos, el visual y musical. ¿Quién no quisiera tener una orquesta sinfónica como aliado? Yo creo que una mayoría, a pesar de que este tipo de proyectos no suelen gustar a ciertos especialistas y / o críticos. Pero eso nos vale dos kilos de verdolaga.
Aquí el buen maese nos sigue mostrando su peculiar y única voz, un timbre que es identificable a miles de kilómetros, pero no deja de sorprender su aguante y entonación. Lógicamente, este señor se rodea de grandes ejecutantes, siempre lo ha hecho, ahora agreguen una increíble banda naval. Chido lido sin dudarlo.
En un poco más de hora y media repasa grandes éxitos de su carrera, así como rolas que no son tan habituales en su repertorio de conciertos. Es de imaginar el quebradero de cabeza que se dieron él y su staff para escoger que canciones montaban a la perfección con estos talentosos músicos de corte clásico. Esa argamasa se vuelve clásica con el paso del tiempo, no ha envejecido mal, au contraire, revaloriza toda la interpretación que ambos combos tocan juntos, y en momentos, separados, más cuando la orquesta hace esas rimbombantes y bellas intros para que llegue el fuego atronador de U.D.O.
Este disco llegó en el 2014 y consta en un fabuloso paquete de 3 discos, dos de ellos son el concierto auditivo, el cual consta de una canción más que lo que se presenta en ese tercer redondo que no es otra cosa que el DVD. Toda esa edición vale mucho la pena y el precio, si lo adquieren desde la página de AFM Records les va a salir bien bara bara; ya que en estos momentos que escribimos esta especie de reseña, tiene un 40 % de descuento, por lo que el Navy Metal Night les sale en 8 euros, unos 170 – 180 varitos. Eso sí, no crean que se los mandan de a gorra, hay que pagar envío y ese no lo sabemos como lo manejen estos chavales.
Sea como sea, vean el set list para que armen de valor a la cartera y adquieran este estupendo concierto:
01 Das Boot
02 Future Land
03 Independence Day
04 Animal Instinct
05 The Hall Of The Mountain King
06 Heart Of Gold
07 Man And Machine
08 Dancing With an Angel (feat. Doro Pesch)
09 Faceless World
10 Ride
11 Days Of Hope And Glory
12 Cut Me Out
13 Trainride in Russia (Poezd Po Rossii)
14 Stillness Of Time
15 King Of Mean
16 Book Of Faith
17 Animal House
Ya es naviduca y es el tiempo de entrarle con todo a ese espíritu consumista, hedonista, lujurioso y frívolo que celebra la aparente llegada de un mesías más de esta decadente plaga que es la humanidad…
Pd. La neta consiguelo de la forma que quieras y verás al buen Udo echarse unos jazz, ska y folk, a su muy chingada gana y eso, eso mis dos lectores, es digno de ver y aplaudir…
Pd 2. Y ver a los teutones sonreír y pasarla chingón es de pocas veces, más los integrantes de tan solemne institución castrense… Imaginen, alemanes y encima de eso, militares… Jejejeje…
