El ex frontman de Twisted Sister es una persona elocuente, con mucha labia para cualquier asunto que se le pregunte. Nunca duda en dar su opinión por muy controversial que parezca, tanto en el tema como en su mensaje personal. Eso ha hecho de él un tipo duro, con agallas para enfrentar la piña que se le ponga en frente y aguantar vara como decimos por estos tropicales lares.
No por nada fue elegido como vocero de los grupos de heavy metal para representarlos en el mismísimo congreso gabacho, cuando la cruzada Reagan estaba en su máximo apogeo y encaro graves acusaciones, para con la música que interpretaba. Como sea, desde esos primeros años, el buen Dee nunca deja títere con cabeza y muestra un liberalismo – que contiene ciertos matices conservadores – que apoya muchas causas de los derechos humanos.
Por eso llama mucha la atención un nuevo comunicado emitido desde su ronco pecho con respecto a que fue apartado de la celebración del Orgullo Gay de San Francisco en los yunaites. El motivo de que lo hayan hecho a un lado fue que respaldo unas declaraciones que dio Paul Stanley, el cantante y guitarrista de Kiss, con respecto a la reasignación de género de menores.
A pesar de que intento dar una explicación y calificar dicha medida como triste y peligrosa moda pasajera, a lo que respondió – y apoyo – Snider: “hubo un tiempo en el que yo también me sentía guapa. ¡Me alegro de que mis padres no sacaran conclusiones precipitadas! Los padres tienen que ser menos retrógrados, derecha e izquierda. No hay necesidad de dirigir al niño en ninguna dirección. Hay que dejar que el niño lo descubra por sí mismo, sabiendo que su familia lo apoya. Yo tuve un padre veterinario y policía muy duro que, aunque movía mucho la cabeza… me dejaba hacer los mío”.
Por estos mensajes que salieron en las redes sociales, la organización del Orgullo canceló la participación de Snider en la celebración que tendrá lugar en San Francisco, tachando al vocalista como transfóbico y destacando que: “hemos acordado mutuamente separarnos, pero agradecemos a Dee que esto como un momento de enseñanza y un recordatorio de que, incluso los aliados necesitan ser educados para asegurarse de que no están promoviendo la transfobia de manera accidental”.
A esa manifestación vino un gran discurso por parte de Dee Snider:
¿Por qué el desfile del Orgullo Gay de San Francisco me invitó a mí, Dee Snider, a ser Gran Mariscal en su desfile y cantar “We’re not gonna take it” en el escenario central del que posiblemente sea el encuentro LGBTQIA+ más importante de la larga historia de la organización?
Citando a Joe Garofoli, redactor jefe de la política del San Francisco Chronicle: “Dee Snider es un defensor de los derechos LGBTQIA+ desde hace mucho tiempo… “Siempre he apoyado a la comunidad y sus importantes causas. Tuve el honor de aceptar la invitación del Desfile del Orgullo Gay de San Francisco e incluso di mi bendición para que We’re not gonna take it se utilizará como grito de guerra de este año. “¡Queer not gonna take it!”.
¿Es eso transfóbico? No sabía que la comunidad transexual esperara lealtad y un acuerdo total con todas sus creencias y que cualquier variación o desviación se considere transfóbica. Entonces ¿mi trayectoria apoyando los derechos de la comunidad transexual a identificarse como quieran y respetando cualquier cambio que puedan hacer en su forma de presentarse al mundo no es suficiente? ¿Por qué no?
Recientemente he declarado que no creo que los niños pequeños estén preparados para decidir su asignación de género. Creo que sus elecciones deben ser apoyadas y aceptadas por sus padres, pero no creo que los niños tengan las capacidades mentales para tomar decisiones racionales y lógicas sobre cosas de una magnitud que les afectará para el resto de sus vidas. No creo que estén lo suficientemente desarrollados mentalmente.
La doctora Jennifer Katzenstein (directora de psicología, neuropsicología y trabajo social, y codirectora del Centro de Salud Conductual del Johns Hopkins All Children’s Hospital) dice: “Es importante que los padres recuerden que el desarrollo varía según los niños, y que en una edad (como los 7 años) no es el final del desarrollo, ni una fecha límite para desarrollar la capacidad de razonamiento. El desarrollo cognitivo continúa en la edad adulta, y como padres, es nuestra responsabilidad seguir desafiando y apoyando a nuestros hijos”. Bien dicho. Eso es ser buenos padres.
Soy un orgulloso moderado. Conduzco un Tesla y un Hummer. Tengo muchas armas, pero apoyo firmemente el control inteligente de armas. Tengo 4 hijos, pero lucho por el derecho de la mujer a elegir. Soy ecologista y viajo en moto. Soy heterosexual y apoyo con orgullo los derechos LGBTQIA+. Para mí (y creo que para muchos de ustedes) ninguna de estas cosas se excluye la una de la otra.
La comunidad transexual necesita moderados que apoyen sus opciones, aunque no estemos de acuerdo con cada uno de sus edictos. Que algunas personas transexuales (no todas) acusen de transfobia a quienes las apoyan, como yo, no es bueno para su causa. No rechaces a las personas que están dispuestas a marchar, cantar y estar a tu lado sólo porque no estemos perfectamente de acuerdo. Seguimos siendo tus aliados.
Yo, Dee Snider, seguiré apoyando a la comunidad transexual y su derecho a elegir, aunque me rechacen, y de cara al futuro, estoy abierto a aprender para poder ser un mejor aliado.
Atentamente, Dee Snider, tu aliado cisgénero y transformista”.
Elocuente a más no poder, con aceptación de sus propias contradicciones, lo que lo vuelve honesto, y en cierta medida, progresivo. Pueden o no estar de acuerdo con sus convicciones, pero hay que aceptar que sus palabras son medidas, razonadas y con base en estudios fundamentados.
Ahora bien, todo es debatible, y en algunos casos, se basa en el gusto, educación e ideología de cada quien, pudiendo irse a los extremos de cada bando…
Con información tomada de las redes sociales de Dee Snider y edición del Invidente Zurdo…