Si hay una banda que merece un sonoro aplauso por su consistencia y denuncia social sin amilanarse es Estado de Shock. Este combo está compuesto por 4 diferentes personalidades que llevan años bregando en las oscuras calles de la doble moral que polulan por esta pseudo angelical ciudad cristera. Su estilo, si es que no los han escuchado, es un mix de heavy metal tradicional, hardcore, grind y thrash, por describirlo de alguna manera.

Pero lo más importante de su descarga sónica, es el mensaje social que conllevan sus letras, las cuales son una protesta que desenmascara las vicisitudes de los poderes fácticos que nos gobiernan, con la anuencia de una gran mayoría. Pero no sólo son contestatarios para con los gobernantes, otros sectores, como la religión, también entran en sus liricas, así como otros tristes tópicos que siguen chingando a los que piensan diferentes a sus anquilosados preceptos.

Eso es Estado de Shock, un choque que busca visibilizar la lucha de los oprimidos, y como a veces los gritos no bastan, es necesario poner rocosas y poderosos sonidos que terminen de redondear el golpe en la mesa. Ondas sonoras que dispersan la quietud de la costumbre social.

Y vaya que fuimos testigos de la intensidad que le ponen estos veteranos músicos en sus presentaciones, cosa que verán en el video que mostraremos. En esa actuación, en el chido Inked Stage Bar, los Estado de Shock le dieron duro y tupido a sus instrumentos, con vocales incluidas. Sus rolas son poderosas, directas, sin necesidad de endulzar o acaramelar la potencia de sus estructuras melódicas.

Otra cosa por resaltar, es que grupos como Estado de Shock son necesarios, ya que no hay tantas voces que desestabilicen, para empezar, con la calma poblana, y así seguirse con más ciudades que requieran una sacudida metálica para poder iniciar la obligada rebelión…

Ocioltura recomienda ampliamente a esta bandota…

Nuevamente gracias Beyond Prods, Inked y Ascension Records por las facilidades dada para con nuestro chavo rucker reportero…